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La Casa de Enrique is a tourist accommodation located in a renovated building.
It used to be the former school of the village of Solipueyo.
La Casa de Enrique offers accommodation for 4 people.
It has two bedrooms, one with a double bed and another with two single beds (with the possibility of an extra bed). It includes a kitchen, a living-dining room, and two bathrooms: one en-suite with a bathtub in the main bedroom, and another separate one with a shower.
The house provides all comforts and equipment: underfloor heating, TV, bed linen, towels, tableware, fully equipped kitchen with fridge, freezer, oven, microwave, vitroceramic hob, dishwasher, washing machine, pots, pans, toaster, coffee maker, juicer, blender, etc.
The house has a garden with outdoor furniture and a barbecue.
Solipueyo is a small village located in the La Fueva Valley, a privileged spot in the eastern part of the Sobrarbe region, very close to the Ribagorza area and just 13 km from the medieval town of Aínsa.
The La Fueva Valley has preserved its rural character, focused on agriculture and livestock, as well as its cultural traditions such as local pilgrimages, carnivals, and more.
The area offers various services such as a supermarket, butcher, bars, restaurants, artisanal bakery, medical clinic, library, playgrounds, and a sports complex with swimming pools, tennis court, fronton, and football field.
It’s an ideal location for practicing all kinds of nature-related sports: hiking, cycling, and especially marked mountain bike (BTT) trails.
Nearby, there are numerous specialized companies offering adventure sports such as rafting, canyoning, mountain hiking, and more.
La Casa de Enrique is an accommodation associated with Turismo Verde Huesca.
Los niños pueden visitar nuestra granja y conocer a nuestros cerdos, gallinas, pollos, conejos, terneros y perros.
Solipueyo es una pequeña localidad situada en el Valle de Lafueva, un enclave privilegiado en la zona Este de la Comarca de Sobrarbe, muy próximo a la Comarca de Ribagorza y a tan sólo 13km de la Villa medieval de Aínsa.
El valle de Lafueva mantiene su carácter de territorio dedicado a la agricultura y ganadería y conserva intactas muchas de sus tradiciones culturales y costumbres, las romerías, los carnavales... a la vez que disponen de servicios como supermercado, carnicería, bares, restaurantes, panadería artesanal, consultorio médico, biblioteca, parques infantiles y un complejo deportivo compuesto por piscinas, pista de tenis, frontón y campo de fútbol.
Su especial ubicación le permite considerarse una zona desde la que es fácil acceder a los rincones y lugares más emblemáticos del Pirineo Aragonés, como el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, el Parque Natural Posets-Maladeta y El Parque Natural de la Sierra y Cañones de Guara, así como a las pistas de esquí de Cerler en el valle de Benasque o las de Piau Engaly o Saint Lary, en la vecina Francia.
Obligada visita son también los pequeños pueblos del valle rodeados de campos de cultivo y que conservan muchos edificios, iglesias y castillos de marcado carácter medieval.
El patrimonio románico del Valle de La Fueva está formado por construcciones defensivas del S.XI, como el castillo de Samitier, el complejo militar de Muro de Roda o el castillo de Troncedo. También de la primera mitad del siglo XI son las primitivas iglesias románicas de San Bartolomé de Muro, de San Juan de Toledo o la de San Emeterio y San Celedonio en Samitier, con influencias claras de los maestros lombardos. Del siglo XII y XIII tenemos las iglesias de Muro, Tierrantona, Morillo, Troncedo y ermitas como la de la Esperanza de Clamosa, las parroquias de Fosado y Charo.
De interés otros templos posteriores como las parroquias de Palo, Formigales, Rañín, Trillo o Clamosa.
Por último, cabe destacar el Santuario de Nuestra Señora de Bruis, en Palo centro de romería de todo el valle.